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Estudié Psicología y me enamoré de la Psicología Educativa, por lo que hice una Maestría en Educación con esa especialización. Mi pasión por la Psicología Educativa se concretó desempeñándome por más de 20 años en distintas instituciones educativas, desde centros infantiles hasta la universidad. Fue una experiencia muy enriquecedora. Mi inquietud por servir mejor, me llevó a explorar el campo de la familia, por lo que realicé una Maestría en Ciencias de la Familia con especialización en Terapia Familiar. Así descubrí que este sería mi mayor campo de acción, por lo que quise prepararme al más alto nivel, … ¡y lo logré! Por 8 años me dediqué a estudiar y a investigar hasta lograr el Doctorado en Filosofía con especialización en Terapia Familiar y de Pareja (PhD in Marriage and Family Therapy). Ahora todo tiene más sentido, entiendo mucho mejor cómo funcionamos relacionalmente los seres humanos y lo mucho que se puede hacer desde este campo. Pero lo más importante, con la experiencia clínica, la del doctorado y la de la vida, encontré cómo lo teórico y lo experiencial, unen de forma coherente, como en un tejido perfecto, mi concepción de la vida y lo que realizo día a día en mi trabajo. ¡Esto es un gozo continúo de descubrimientos, claridades e incertidumbres, para luego volver a aclarar y volver a descubrir! Es simplemente vivir de una manera plena. Me dedico a ayudar a las personas a alcanzar relaciones interpersonales más armoniosas, satisfactorias y saludables, y a alcanzarlas yo también. Soy esposa y madre de tres maravillosas hijas y juntos como familia vamos uniendo y soltando puntos en el tejido de la vida.